El pasado 06 de febrero de 2018, la Asamblea Legislativa aprobó la última enmienda propuesta al Protocolo de Montreal relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono.

Se trata de la sexta modificación que se le ha hecho al Protocolo de Montreal y tiene como finalidad reducir la producción y el consumo de sustancias agotadoras de ozono, disminuyendo su potencial liberación a la atmosfera. Cada enmienda incluye una lista de sustancias potencialmente agotadoras de la capa de ozono, cuyo consumo debe ser regulado a fin de ir reduciendo de forma paulatina la su emisión. Vale destacar que este enfoque que ha venido proponiendo el Protocolo de Montreal, ha demostrado ser muy efectivo, siendo este un caso excepcional en la cooperación internacional, al mismo tiempo que ya se han visto señales tempranas de recuperación de la capa de ozono.

Esta enmienda, que es producto de 28° reunión de las Partes del Protocolo de Montreal, celebrada en Kigali-Ruanda, en octubre de 2016, tiene el objetivo específico de eliminar la producción y consumo de gases hidroflurocarbonos (HFC), que, a pesar de no ser potencialmente agotadores de la capa de ozono, son gases de efecto invernadero, por lo que si contribuyen con el calentamiento global.

Esta inclusión de regulación de los HFC es de particular importancia porque este tipo de gases ha tenido un crecimiento de consumo respecto a los otros gases de efecto invernadero, porque son utilizados como alternativa a las sustancias agotadoras de la capa de ozono, que ya el protocolo ha regulado con anterioridad.

En concreto, se establece a través de esta enmienda, que los países desarrollados comenzarán a disminuir gradualmente el uso de los HFC a partir del 2019 para llegar alcanzar a una reducción del 97,8 % para el año 2035; mientras que aquellos en vías de desarrollo, congelarán sus niveles de consumo entre los años 2024 y 2028.  Asimismo, la enmienda establece excepciones para los países de altas temperaturas ambientales, para los que se prevé un calendario de eliminación extendido. También, se señala que los países en vías de desarrollo podrán optar por asistencia financiera y técnica del Fondo Multilateral del Protocolo de Montreal, con el fin de facilitar la transferencia de mejores tecnologías. Este mecanismo ha sido aplicado para implementar las enmiendas anteriores, con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y se ha traducido en casos de éxito en nuestro país.

A pesar de que es hasta ahora que la enmienda adquirirá carácter de obligatoriedad, ya las autoridades costarricenses han ido avanzando en la eliminación gradual de los gases HFC, desde el año 2010 que se empezó a controlar la importación de este tipo de sustancias.

 

Autor:

Luis Palacios, Consultor Ambiental.